Reforma Tributaria Duque 4.0: algunos retos del nuevo florero de Llorente

Redacción Tributarios / Aduaneros / Arancelarios | Mayo 5 de 2021 – La presentación para la discusión de la Tercera Reforma Tributaria presentada por el Gobierno de Iván Duque encendió al País, tiene hoy a Colombia sumida en una de las mayores crisis que se han visto en los últimos años en el País, a la que además se suman la discusión de la Reforma a la Salud, la grave crisis económica, el desempleo, el sistema pensional, la reducción de la pobreza y la desigualdad, la administración efectiva de los recursos públicos, la protección de la vida de los líderes comunitarios e indígenas, la mejora de las políticas del Gobierno frente a la vacunación contra el Covid-19 y una vez más el uso excesivo de la fuerza pública, que han generado rechazos de organismos internacionales como Naciones Unidas, la Unión Europea y las embajadas de Noruega, Alemania y Canadá, entre otros. Este momento coyuntural del Estado Colombiano exige cambios profundos en las políticas nacionales, la coordinación del aparato estatal y la escucha activa de los ciudadanos que reclaman la protección de sus derechos fundamentales.

Fuente de Imagen: Cámara de Diputados de Brasil

Una difícil semana ha vivido nuestro País. Se tumbó el polémico proyecto, obligó a la salida del ministro de Hacienda, los dos viceministros del despacho y el Director Nacional de Planeación, puso a Colombia en la lupa de las organizaciones internacionales de derechos humanos que hacen cálculos sobre las sistemáticas violaciones a los derechos humanos en el País, tiene ad portas de una moción de censura al ministro de Defensa, instó a una reunión de análisis de parte de los presidentes de las Altas Cortes del País para revisar temas sensibles exigidos por la ciudadanía, convocó a exmandatarios y a expertos en diversas materias para revisar la situación de orden público en el País y sus efectos y tiene en alerta a los ciudadanos sobre los puntos donde se concentran las marchas. Son muchos los puntos que se podrían analizar de esta situación, desde lo institucional, lo social, lo político, lo económico, el futuro electoral (por qué no decirlo), y lo que se dice en los medios de comunicación y las redes sociales del País.

Cuarta Reforma Tributaria: una medida que debería empezar a calmar los ánimos

Fuente de Imagen: Ministerio de Hacienda y Crédito Público

Aunque la violación de los derechos humanos es evidentemente el punto más álgido de las protestas que se han vivido en más de una semana en el País, lo cierto es que lo que encendió la polémica fue la Reforma Tributaria, por lo que muchos expertos coinciden en que el desescalamiento de la crisis podría también iniciar desde ahí. El nuevo ministro de Hacienda, José Manuel Restrepo, quien se venía desempeñando como ministro de Comercio, Industria y Turismo, señaló que la nueva Reforma Tributaria debe recaudar 14 billones de pesos (9 menos que la propuesta por su predecesor) y se concentraría en 6 ejes:

1. La Reforma sólo buscará los recursos para atender las necesidades más urgentes.
2. No se comprarán aviones militares.
3. Se mantendrán los apoyos a los más vulnerables y los más afectados por la pandemia.
4. No se tocará el tema del IVA.
5. No se ampliará la base del impuesto de renta a personas naturales.
6. Se revisará rubro por rubro el Presupuesto y los gastos públicos para generar mayor austeridad.

Algunas miradas adicionales de corte social

Para Cristian David Duque, Administrador Público de la Escuela Superior de Administración Pública – ESAP, quien además es promotor social, cultural y musical de la localidad octava de Kennedy en Bogotá desde hace más de 10 años, una Reforma Tributaria no debería gravar la canasta familiar ni ninguna necesidad básica de los colombianos, porque esto representaría un golpe muy duro para la clase media del País y las personas más vulnerables, lo que está llevando a buena parte del País de una pobreza multidimensional a una pobreza extrema.

“Lo que debería contemplarse en la nueva propuesta es la austeridad en el gasto público”, por lo que enfatizó en que se debe reducir el gasto militar y redireccionar los compromisos de la adquisición de la nueva flota aérea militar para seguir promoviendo los programas sociales con esos recursos. “Así, se podrían fortalecer las necesidades básicas de los colombianos que sufrieron la pérdida de su empleo o de sus fuentes de ingreso como el caso de los pequeños comerciantes o microempresarios mayormente afectados por la pandemia”, explicó Cristian Duque.

Según Daniel Fernando Cruz, Administrador Informático con Especialización en Gerencia de Proyectos y quien cursa actualmente una maestría en Gestión Financiera, la Nueva Reforma Tributaria debe adelantar la enajenación en derecho de venta (PUT) de la Nación, a fin de generar un presupuesto suficiente qué pueda ser utilizando en programas como Ingreso Solidario y el Programa de Apoyo al Empleo Formal - PAEF, que son las necesidades de servicios que se requieren de manera inmediata en materia social y económica para los colombianos mayormente afectados por la crisis económica que trajo la pandemia en nuestro territorio”.

Por otra parte, las personas con ingresos mensuales por debajo de los 4.1 millones de pesos no deben declarar renta y en ninguna circunstancia se debe aplicar un gravamen de IVA a los bienes y servicios de la canasta familiar”, ya que estas medidas son inequitativas y resultan afectando a las personas más afectadas con las crisis económicas en el País.

Aspectos eminentemente tributarios

Según el Administrador Público, Cristian David Duque, en aspectos tributarios se debe generar una formalización de la economía, reduciendo la evasión fiscal de parte de las personas más acaudaladas pero que no tributan por estar en la informalidad laboral, todo esto apoyados en instrumentos tecnológicos que permitan gravar a más personas que pueden aportar con mayores recursos a la recuperación del País y se debe emprender un plan más agresivo para las rentas no laborales de las personas más ricas del País. “Colombia es uno de los países de Latinoamérica que tiene uno de los más altos porcentajes de informalidad laboral, por lo que se debe emprender un plan más agresivo para evitar la elusión de este tipo de impuestos y cerrar los huecos fiscales que están concentrados en las rentas no laborales”, expuso.

“Por ejemplo, una persona que gana entre 6 y 8 millones de pesos al mes paga un promedio del 5% del impuesto sobre renta, pero alguien que gana 50 millones apenas tributa el 17%, por lo que se debe ser más equitativo en ese sentido”, sostiene. Para él, por ejemplo, en España tributan un 41% de los ciudadanos que son los que pueden sostener el peso tributario del País. “De esta manera podríamos solventar ese hueco fiscal y se podrían mantener los programas sociales”, expuso. Y puntualizó que, si se logra mayor equidad entre la tributación de la población más rica del País, los grandes empresarios y por otro lado los microempresarios y la sociedad que depende de un sueldo como empleado, existirá una sostenibilidad fiscal que podrá mantener todos los programas sociales del Gobierno.

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REVISTA DEBATE ESTRATÉGICO SIGLO XXI

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